Por favor, entre
Así es como empieza tu visita a la exposición de Lindalocaviejabruja, con un toque de misterio, sin saber que te espera detrás de esa puerta. Si algo está claro, es que decidí mal la exposición a la que ir sola...
¡QUÉ MIEDO!
Es curioso como nuestro cuerpo reacciona ante cosas raras y lugares desconocidos. Nada estaba donde debía estar, nada era lo que aparentemente parecía, todo tiene un significado diferente para Ramo.
De lo que sin duda más he disfrutado es de sentirme de nuevo como una niña pequeña, ya que he tenido que acercarme tanto que casi la punta de mi nariz tocaba lo que veían mis ojos. No he querido perderme ningún detalle, y había muchos detalles.
Las imágenes que hay a continuación igual despiertan curiosidad en ti y puede que entiendas un poco mejor a lo que me refiero, pero si tan valiente eres como crees, ¿te atreverías a verlo con tus propios ojos y solo?
Fotografías realizadas por mi, Cristina Moros
No hay comentarios:
Publicar un comentario